¿Cómo se relaciona la actividad física con la artritis?
- Otros2
- 3 de octubre de 2022
- 13.16 h
Hasta hace poco, la creencia común sobre el mejor tratamiento para la artritis era el reposo. Hoy en día, los expertos abogan por el ejercicio controlado para favorecer la circulación y aliviar la inflamación.
Muchas personas con artritis reumatoide tienden a evitar el ejercicio porque temen que la actividad empeore el dolor articular. Sin embargo, el ejercicio es uno de los tratamientos clave para reducir la discapacidad generalmente asociada a la artritis reumatoide. Algo tan sencillo como la actividad física para alguien sano, en el paciente con artritis reumatoide se convierte en un reto, por su particular afectación articular, pero aun así existe todo un universo de posibilidades, donde se puede instruir al paciente para que poco a poco alcance los objetivos propuestos de mantener el rango articular y, posteriormente, aumentar sus objetivos una vez que asimile las pautas de ejercicio.
El Dr. Alejandro Hijarrubia Cloquel, Fisioterapeuta y Entrenador de PHYSIOLED; menciona que estos son los tipos de ejercicio físico que un paciente con artritis reumatoide puede realizar con la ayuda de un fisioterapeuta:
Ejercicios pasivos: son aquellos realizados exclusivamente por el terapeuta sin solicitación muscular por parte del paciente. Trabajan sobre elementos pasivos: ligamentos, cartílago articular.
Ejercicios activos: hay contracción muscular y sólo actúa el paciente. Trabajan sobre los músculos.
Ejercicios asistidos: terapeuta y paciente trabajan juntos. Trabajo mixto.
Otro beneficio de que los enfermos de artritis reumatoide hagan ejercicio de forma controlada es que las sustancias que genera el cerebro tras la actividad física (endorfinas) tienen un conocido efecto antiinflamatorio y nos ayudan a descansar por la noche, lo cual es muy importante para los pacientes con artritis reumatoide.